Comprar una heladera usada puede ser una excelente opción para quienes buscan ahorrar dinero, pero es importante tener en cuenta algunos aspectos clave para evitar problemas futuros. Una heladera es uno de los electrodomésticos más esenciales en cualquier hogar, por lo que asegurarse de que funcione correctamente es fundamental.
En el mercado de segunda mano, es posible encontrar buenas ofertas en refrigeradores, pero no todas son iguales. A veces, el bajo precio puede venir acompañado de problemas que se presentan después de la compra, como fallas en el motor o un mal rendimiento en la refrigeración.
Para evitar eso, es recomendable realizar una inspección minuciosa antes de concretar la compra. No basta con ver el estado estético del aparato, también es esencial verificar su funcionamiento interno. Además, existen distintos tipos de heladeras, como las de una puerta, dos puertas, con freezer o sin freezer, y es importante elegir la que mejor se adapte a tus necesidades.
Es común que muchos compradores se dejen llevar por el precio sin analizar si la heladera realmente está en buen estado. Sin embargo, una compra inteligente requiere paciencia y atención a los detalles. A continuación, te explicaremos qué revisar y qué preguntas hacerle al vendedor para asegurarte de que estás llevando un buen producto a casa.
Desde el sistema de refrigeración hasta el estado de las gomas de las puertas, todo debe ser revisado cuidadosamente. Si sigues estos consejos, podrás evitar futuros gastos en reparaciones y garantizar una compra satisfactoria.
Inspección visual y limpieza
El primer paso es realizar una inspección visual de la heladera usada. Fíjate en el estado exterior e interior. Busca señales de corrosión, golpes o grietas, ya que eso puede ser una señal de que la heladera ha sido mal cuidada o ha sufrido daños previos. Asegúrate de que las puertas cierren correctamente y que no haya signos de humedad o moho en el interior.
Es recomendable también revisar el estado de las gomas de las puertas. Si las gomas están desgastadas o rotas, la heladera no sellará adecuadamente, lo que puede afectar su capacidad para mantener una temperatura constante. Si es necesario, pregunta al vendedor si ha reemplazado las gomas en algún momento o si se puede hacer sin problemas.
Antes de encender el aparato, es fundamental limpiarlo bien. Eso no sólo garantizará que la heladera esté libre de olores, sino que también evitará la proliferación de bacterias. La limpieza también te permitirá inspeccionar más a fondo el estado general del equipo. Asegúrate de usar productos de limpieza suaves que no dañen los componentes del refrigerador.
Funcionamiento del sistema de refrigeración
Uno de los aspectos más importantes a revisar es el sistema de refrigeración. Ese es el corazón del aparato y determinará si la heladera es eficiente para mantener los alimentos frescos. Antes de comprarla, asegúrate de que el motor funcione correctamente y que la heladera alcance la temperatura adecuada en poco tiempo. Si es posible, pide al vendedor que conecte la heladera para observar su funcionamiento en tiempo real.
Asegúrate de que el compresor no haga ruidos inusuales, ya que eso podría ser señal de un problema mayor. Además, revisa si hay escapes de gas refrigerante. Esos escapes son difíciles de detectar a simple vista, pero una caída en la temperatura puede ser un indicio claro de que algo no está bien. En caso de estar buscando un refrigerador Samsung, es recomendable prestar atención a modelos específicos que sean reconocidos por su durabilidad y eficiencia energética.
Al optar por una marca reconocida, como un refrigerador Samsung, tendrás la garantía de estar comprando un producto confiable. Sin embargo, siempre es necesario hacer la revisión con anterioridad a la compra.
Verifica el consumo energético
Uno de los factores que muchos pasan por alto al comprar refrigeradores usados es el consumo de energía. Las heladeras más antiguas tienden a ser menos eficientes en términos energéticos, lo que podría aumentar considerablemente tu factura de luz. Asegúrate de revisar la etiqueta de eficiencia energética del aparato.
Si la etiqueta no está visible o el vendedor no tiene información clara al respecto, es importante investigar un poco sobre el modelo específico. Un refrigerador que consume mucha energía puede generar un ahorro inicial en la compra, pero a largo plazo, se traduce en mayores costos de operación. Por lo tanto, es recomendable elegir un modelo que sea eficiente para reducir gastos innecesarios.
Por otro lado, verifica si el refrigerador que estés considerando tiene características como el "modo de ahorro de energía" o si incluye la opción de control de temperatura automática, lo que puede ayudar a mantener los costos bajos.
Estado de los estantes y compartimientos
El interior de la heladera también es un aspecto clave que no debes pasar por alto. Revisa el estado de los estantes y compartimientos. Si alguno está roto o presenta daños, podrías tener problemas para almacenar tus alimentos correctamente. Además, verifica que los compartimientos para verduras, huevos y botellas estén en buen estado.
Si bien esos componentes pueden parecer secundarios, reemplazarlos puede ser costoso y no siempre es fácil encontrar piezas para modelos antiguos de refrigeradores usados. Pregunta al vendedor si esos repuestos están disponibles en caso de que necesites reemplazarlos en el futuro.
Garantía o servicio técnico
Un detalle importante al comprar una heladera usada es preguntar por la garantía o si el vendedor ofrece algún tipo de servicio técnico en caso de que surjan problemas después de la compra. Si el aparato aún está dentro del período de garantía del fabricante, asegúrate de obtener toda la documentación necesaria.
Aunque no todos los vendedores ofrecen garantías en productos de segunda mano, algunos pueden ofrecer un período corto de prueba para asegurarte de que la heladera funciona correctamente. Si tienes la posibilidad de acceder a ese tipo de servicio, no dudes en aprovecharlo.
Preguntas clave al vendedor
Cuando te encuentres con el vendedor, asegúrate de hacer las preguntas correctas. Algunas de las preguntas más importantes incluyen:
- ¿Cuánto tiempo tiene la heladera? Saber la antigüedad del aparato te dará una idea de cuánto tiempo más podría durar antes de necesitar reparaciones mayores.
- ¿Ha tenido alguna reparación? Esto te ayudará a conocer si la heladera ha tenido problemas previos y si hay componentes que han sido reemplazados.
- ¿Cuál es la razón de la venta? Algunos vendedores pueden ofrecer heladeras en perfecto estado simplemente porque están actualizando sus electrodomésticos, mientras que otros pueden vender aparatos con problemas. Saber el motivo de la venta te ayudará a evaluar si vale la pena la compra.
FAQs
¿Qué checar antes de comprar un refrigerador?
Verifica el estado del motor, las gomas de las puertas y asegúrate de que el sistema de refrigeración funcione correctamente.
¿Es seguro comprar un refrigerador usado?
Sí, siempre y cuando verifiques su buen estado y funcionamiento antes de la compra.
¿Qué hacer cuando compras una heladera?
Limpia bien el interior, verifica su funcionamiento y ubícala en un lugar adecuado en tu hogar.
¿Cuánto tiempo tarda en enfriar una heladera usada?
Generalmente, entre 4 a 6 horas para alcanzar la temperatura adecuada después de ser encendida.
