La Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de las Tecnologías de la Información en los Hogares 2016 (ENDUTIH), elaborada cada año por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), arrojó varios puntos clave para comprender de qué manera dichos avances nos ayudan a alcanzar el desarrollo social.
Empecemos por conocer los datos estadísticos principales:
- 15.7 millones de hogares tienen acceso a Internet (47.0% del total)
- 15.2 millones cuentan con equipo de cómputo (45.6%)
- 30 millones disponen de servicios de telefonía fija y móvil (38.7% y 86.4% respectivamente)
En México, estas tecnologías cada vez ganan más terreno dentro del núcleo familiar, en especial el uso de Internet. El tamaño de la población que goza de acceso a las TIC ha crecido en relación a años pasados; por ejemplo, hubo un avance anual de 22.0% respecto a 2015. Sin embargo, para lograr un desarrollo sustentable, también resulta fundamental fomentar los complementos análogos, ya que el aprovechamiento de los beneficios del acceso a la red aún deja que desear.
Es innegable: la era digital en México ha llegado, Vía Expansión
El Banco Mundial, en su informe llamado Dividendos Digitales, menciona que algunos de esos complementos análogos son:
- El fortalecimiento de las regulaciones que aseguren la competencia
- La adaptación de los trabajadores al mundo digital
- La educación que relacione a los estudiantes con las TIC
En cuanto a los beneficios de Internet que aún no se han conquistado de forma idónea se destacan los siguientes:
- Mejorar la productividad laboral
- Incentivar la comunicación entre ciudadanos y gobiernos
- Hacer uso del comercio electrónico
- Optimizar la búsqueda y comparación de información
Al respecto, la ENDUTIH indica que, de 2015 a 2016, la cantidad de usuarios que emplean Internet para obtener información se redujo de 88.7% a 84.4%. De hecho, también decrecieron los usuarios que lo empleaban como apoyo a la educación y a la capacitación.
Por otro lado, tan sólo 9.9% de los mexicanos usaron Internet para realizar operaciones bancarias; 15.9% para el comercio electrónico y 45.3% para leer periódicos y revistas. Cabe mencionar que estas actividades registraron un incremento respecto al año 2015.
En la siguiente gráfica realizada por The Social Intelligence Unit, pueden observarse los cambios:
Hábitos de Internet en México, Vía The SIU
Brecha geográfica: el objetivo a considerar
La ENDUTIH se encarga de obtener datos sobre la disponibilidad y uso de las TIC en los hogares mexicanos y su importancia reside en que, al garantizar el acceso a la información a segmentos más amplios de la población, la brecha entre clases puede difuminarse. Sobre ello, la encuesta arroja los siguientes datos: al segmentar los indicadores por entidades federativas, se identifican brechas geográficas significativas.
Por ejemplo, los datos obtenidos en Chiapas muestran la menor cantidad de hogares con conexión a Internet (13.3%) y acceso a equipo de computo (20.9%). En cuanto a servicios de telefonía fija y móvil, Oaxaca registra la menor proporción de habitantes con ellos (72.3%). No es ninguna casualidad que estos dos Estados de la República Mexicana se encuentren en los lugares 32 y 30, respectivamente, en el Índice de Desarrollo Humano (IDH).
La brecha digital, el enemigo a vencer Vía YouTube
Por otro lado, las entidades federativas que ocupan el primer y cuarto lugar en el IDH, la Ciudad de México y Baja California Sur, registran la proporción más alta de hogares con equipo de cómputo (64.5%) en la CDMX y la mayor cantidad de hogares con acceso a Internet (75.5%) y telefonía móvil (97.3%) en Baja California Sur.
Así, estos datos obtenidos del ENDUTIH 2016 brindan información puntual sobre la adopción de las TIC en los Estados del interior de la República y deben ser aprovechados para diagnosticar, proponer y llevar a cabo políticas que garanticen el acceso a las TIC en el país.
La revolución digital ha generado beneficios inmediatos: facilitan la comunicación y la obtención de información; generan mayor conveniencia; ofrecen productos digitales gratuitos y nuevas formas de ocio. Sin embargo, es momento de comenzar a ver el Internet como un elemento esencial para el desarrollo integral a nivel país.