Según un nuevo reporte de The CIU, hecho con información del IFT, la forma de jugar de los aficionados mexicanos ha evolucionado y es posible identificar algunos de los usos y actitudes de los videojugadores mexicanos durante el 2017.
No es la primera vez que vemos este tipo de reportes, pero sobresale que, a decir de la firma consultora, el número de gamers mexicanos superó durante 2017 la cifra de 68.7 millones de personas, incluyendo diferentes plataformas y dispositivos de juego. Cabe mencionar que dicho registro refleja un incremento de al menos un 15.1% respecto a 2016, cuando se contabilizaron unos 59.1 millones de jugadores.
Existen jugadores ocasionales, hardcore, móviles, sedentarios, online, etc., lo que se traduce en nuevos modelos de negocio y oportunidades para los desarrolladores del país. Al segmentar por edad, resalta un crecimiento entre usuarios mayores de 50 años.
En cuanto al dispositivo de uso tenemos que los smartphones ocupan el primer lugar de preferencia, donde unos 46.5 millones de gamers (68%) juegan con ellos.
Después se ubican las consolas fijas, las favoritas del 33% de los videojugadores (22.8 millones), quienes gastan en promedio $727 pesos por juego y tienen 3.4 veces más sesiones de diversión al mes, con una duración media de 1 hora 50 minutos.
Al cierre de 2017, 70.7% de los jugadores de consola fija comentaron que se conectan a Internet para jugar en línea con otras personas.
Como puedes ver, la industria de los videojuegos se constituye como un segmento relevante en términos económicos y de entretenimiento en nuestro país, para usuarios y desarrolladores. Por lo que cada vez se reconoce con mayor frecuencia su impacto en nosotros, como para el desarrollo de habilidades de pensamiento crítico, resolución de problemas y acertijos, desarrollo de memoria, conocimiento cultural, de lenguajes y habilidades digitales.